"Los pájaros nacieron para cantar"
No hay amancecer más hermoso que despertarse arrullado por las aves. Esa experiencia de vida es una de las más gratas de mi vida; sobre todo en mis años de infancia que transcurrió en medio de abundante vegetación. Ya de adulto me he puesto a pensar ¿ Por qué es que las aves cantan con mayor alegría y fuerza durante el amanecer?. Para mis adentros me respondo que ellos son los juglares de Dios, que le cantan para agradecerle el nuevo día que está por empezar.
De este modo estas criaturas de Dios me enseñan que no hay mayor alegría que empezar el día que hablando con nuestro creador. Y hablar con Dios es gratis, no cuesta más que el tiempo y el deseo de hacerlo.
Que aprendamos todos a ser los juglares de Dios, que le hablemos, le cantemos con alegría, especialmente en cada Eucaristía que nos toca celebrar; pues ya lo decía San Agustín quien canta ora dos veces.