jueves, 27 de noviembre de 2014

                        " Muchas maneras de trascender"

La vida  es una cadena que no se llega a romper, y va trascendiendo en cada gota de sangre, en cada hilo genético, que discurre de una vida a otra. Trascendemos en las costumbres, en los modos de vivir la vida. Maneras de  comer y celebrar las fiestas e incluso en las formas como expresamos la alegría, el dolor y la tristeza.

Lo más importante es que no perdamos de vista, que aún en lo humano podemos y debemos trascender. Cuando nos esforzamos en  trasmitir el arte, los talentos y habilidades que tenemos, cuando hacemos escuela enseñando y compartiendo con los demás lo que de verdad sabemos y por su puesto compartiendo lo poco que podamos tener.

En la fe, inevitable, trascender, pues, es la fe que da sentido a la vida humana, es la fe la que en última instancia hace que la vida, no se quede al ras del suelo, solo mirando la sombra que proyecta el sol.               
                 

                                                            "Vale la pena vivir"

Vale la pena vivir, porque hay razones suficientes para ello. Hay tantas cosas hermosas que disfrutar y difundir de que existen. Por supuesto que también existen cosas que tenemos que mejorar, modificar y cambiar para que la tierra, éste lugar donde vivimos, siga siendo vivible para nosotros y para todos aquellos que han de sucedernos  en la vida y en la tierra.   

La creación, todo lo que nos rodea  es hermoso, somos nosotros los humanos que con nuestras acciones en lugar de hacer más bello  lo que nos rodea, afeamos lo que Dios nos ha dado como el más valioso  regalo, que es  la tierra, el lugar  donde vivimos.