miércoles, 29 de junio de 2016





sábado, 25 de junio de 2016

EL ABRIGO

Si mi cuerpo aterido de frío, busca tu abrigo Señor/ abriga primero el rincón más íntimo de mi corazón.

Si a mi sangre le falta del rojo su color, no tardes en venir; que si tu me faltas, me muero Señor. 

Es invierno, el frío arrecia por todas partes, con mayor crudeza en los andes más elevados  del Perú.  Por ser un suceso que se repite todos los años por está época; quizás ya no nos llama la atención. 

Eso es lo peor que nos pueda suceder como país; dejar que se enfríe, no el cuerpo, sino el alma, el corazón de los peruanos. 

Frío nuestro corazón, nos importará poco o nada el dolor y el sufrimiento de los demás.   Ya no habrá lugar en nosotros para solidaridad y la ayuda a los demás.

Lo peor de todo, es que nosotros,  habremos muerto  por inanición en el corazón,  antes de los que mueren por falta de abrigo y calor.   

Porque un corazón que no ama, es un corazón muerto en vida; un corazón que se negó a vivir  y  renunció a ser feliz                         

sábado, 18 de junio de 2016

                                              Feliz día de padre

                                        "Dando la vida dos veces"

Cortos  once añitos tenía Gener cuando le detectaron que tenía insuficiencia renal; es decir que tenía mal los riñones y desde entonces ya no volvería a ser el niño alegre y juguetón que todos los fines de semana solía exigir a su padre que lo llevara al parque de la ciudad para jugar en cuanto juego mecánico tuviera a la vista y a la mano.  

  
Cuando las cosas se complicaron en la salud de Gener, dos veces por semana tenían que llevarlo al hospital de la  ciudad  para díalisarlo. La distancia entre la casa y el hospital era de 70 Km; por una carretera  serpendeante como los destinos de los padres y la abuela de Gener.


Lo cierto es que si los caminos, las trochas o carreteras en los andes peruanos, son curvilíneos y serpendeantes a cada paso, como la vida de sus habitantes; ellos, hombres y mujeres con su esfuerzo y dedicación no sólo son capaces de enderezar los caminos y los destinos de la historia de su pueblo, de su país; también lo son, que duda cabe, de doblegar los caminos torcidos de la vida que les  pueda tocar.  


Con venta de comida, postres que ofrecían a los vecinos  y a todo  el que pasaba por su casa de los padres de Gener, fueron recaudando fondos para  su intervención  cuando hiciera falta y  se encontrara el donante del riñón, que era en si lo más importante.


Seis años pasaron en esa espera y el donante jamás llegó; no sé si por ser pobres,  la vida les  probaba de esa manera, o la vida misma estaba ofreciendo la oportunidad para aumentar los gestos de amor de parte de los padres hacia su hijo. Que más se podía esperar, si la salud del niño se iba complicando más, si las esperanzas de encontrar donante no aparecían por ningún lado.

Fue en esas circunstancias en que el padre optó por ser él, quién donaría el riñón a su hijo. Y  así lo hizo; la intervención fue éxito. Después de unos días de convalecencia padre e hijo volvieron a casa y por fin ese niño que fue, hoy ya convertido en adolescente volvía a sonreír  junto a los suyos. 


Cuando llegó el día del  cumpleaños de su  padre, Gener, con un gran sentido de gratitud y ternura le escribió en una tarjetita : "Gracias papito por darme la vida dos veces, no tendré como pagarte todo lo que haz hecho por mí; espero ser yo tu mejor regalo y que te sientas muy orgulloso de mí "      
        


miércoles, 8 de junio de 2016


                           "Todo entra por los ojos"

Había escuchado de ti, que viniste a la tierra hace ya más de dos mil años.

Había leído con fascinación tu buena noticia, contenida en los evangelios.

Te había sentido en los signos visibles de tu presencia que son en si los sacramentos.

La tierra y todo cuanto en ella habita me  hablan de ti.

Solo basta prestar oído a las chicharras, a los pájaros y al viento para descubrir tu lenguaje de amor por la creación.

Es tu   amor incondicional por la humanidad lo que  desborda toda comprensión. Eh allí tu razón de ser Dios:

Crearnos un día, recrearnos luego, y si vamos lejos de tu lado, no dejas de buscarnos hasta dar con nosotros y llevarnos a tu regazo

Por eso lo que más te pido, lo que más te ruego mi amado Dios : mis ojos  físicos y los del corazón bien abiertos, para descubrirte  tan presente, tan cercano en el ser humano.

Ayúdame a vencer prejuicios y mi indiferencia para optar por ti, para sentirte cerca y tan real en  mi prójimo.